El miércoles fue, sin duda, una buena excusa para regresar a una sala de cine. Hubo con quién ir, Hubo 2x1 (sí, es un timo, pero le seguimos llamando así), hubo coche... No dudé en qué película ver. Bueno sí lo hice, la otra opción era Back to the Future. Puritita calidad comprobada. "¡NO!" -me dije -"Tienes q ver la de Scott Pilgrim". Eventualmente fue así.
Es tan complicado salir con una mujer cuando uno se encuentra en mi posición; quieres encajar en ese viejo y nefasto paradigma al que la gente (la mujer) se refiere como "educado" o "caballeroso", entonces preguntas: "¿Qué quieres ver?", ya sabes lo que ella va a contestar: "Hhmmm... no sé, ¿cuáles están?", "Pues la que quieras", "¿Esa es de broma? Una romántica". Aun así lo tienes que hacer, tienes que preguntar. Equis, ese no es el punto de este relato. "Vamos a ver Scott Pilgrim", dije como dicen (que dicen) los hombres.
La película fue momentánea, enorme, buenísima, sublime. "Caray que teto soy" -pienso y luego pienso más: "que bien que lo soy, ahora lo soy con más gusto, así le puedo entender mejor a esta gran historia". Una historia que se siente bien propia.
La novia que te encanta, sueñas con ella -¡pero cómo no vas a soñar con ella!-, que crees inalcanzable y cuando te das cuenta que estaba junto a ti, es porque ya se está llendo. ELLA, la que sabes que te va a llevar tan arriba, que va a doler hasta el orto el madrazo que te vas a poner en la caída. Te vale M-A-D-R-E-S. El viaje, mientras, está poca madre. Aún así hay algo que no se siente seguro, creo que es ella... creo que es tu autoestima. "No, es ella" dice tu pinche ego.
La(s) pelea(s) del protagonista contra los malvados ex-novios, la entendí de dos formas: estaría poca madre darte en la id. con esos weyes -más si hay un narrador tipo Street Fighter-; lo otro que me vino a la mente es que, de hecho, siempre te estás dando en la madre con los ex's de tu vieja, no litealmente, sí con todos los traumas que salen a la superficie en el día a día. Bueno ya, te estás dando en la madre contigo mismo. Pinche ego, otra vez.
En fin, no estropearé la trama a nadie, pero la recomendaré a todos. Que gran película, ojalá me invitaran algo por hacerle tanta promoción, pero es que de verdad te hace sentirte geek, nerdo, un tetazo, pero sin remordimientos.
Si hay algo que inspira, son las películas así, la música como la de ese filme, las referencias que sólo la gente como tú entiende, y bueno, ella, la que te viene a la mente cuando ves a Ramona Flowers.
Las ex's nos inspiran.
Sí, soy un tetazo. Y qué, también Scott Pilgrim y ya ven.
El Loco
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