En un día como hoy de 1986, dejaba de existir mi escritor favorito y uno de los mas grandes de todos los tiempos: Jorge Luis Borges
The unending gift
Un pintor nos prometió un cuadro.
Ahora, en New England, se que ha muerto. Sentí como otras veces, la tristeza y la sorpresa de comprender que somos como un sueño. Senti fastidio y acaso injurié de él. Pensé en el hombre y en el cuadro, y en el hombre y en el cuadro perdidos.
(Sólo los dioses pueden prometer, porque son inmortales).
Pensé en el lugar prefijado que la tela no ocupará.
Pensé después: si estuviera ahí, sería con el tiempo una cosa más, otra cosa entre las cosas, una de las vanidades o hábitos que en mi mi casa recurro como una amistad; ahora es ilimitada, incesante, capaz de cualquier forma y cualquier color y no atada a ninguno.
Existe de algún modo. Vivirá y crecerá como una música, y estará conmigo hasta el fin. Gracias, Jorge Larco, por haberme regalado este cuadro.
(También los hombres pueden prometer, porque en cada promesa siempre hay algo de inmortal).
Jorge Luis Borges.
Cualquier Cosa Nos Inspira.
No hay comentarios:
Publicar un comentario